Mostrar más resultados
28407

Qué es y cómo se desarrollará el IoT enablers

Qué es y cómo se desarrollará el IoT enablers

Escrito por Albert Miró

El Internet de las cosas, o Internet of Things (IoT), es una realidad, está en todos lados y en los objetos que menos nos esperaríamos. Lo encontramos desde relojes gracias a los smart watches, hasta los coches o incluso en básculas gracias a Xiaomi. La conectividad a la red que han adquirido todos estos productos permiten que los podamos sincronizar con nuestros teléfonos inteligentes Android o iOS y podamos gestionar distintos aspectos de ellos, recibir actualizaciones o incluso tener una biblioteca en la nube de recetas de cocina gracias a los robots dedicados a ello (entiéndase robots de cocina). Pero, ¿qué permite poder gozar de esta maravilla tecnológica? Hoy os quiero hablar de los IoT enablers, pequeños circuitos dentro de estos aparatos para convertir cualquier objeto en “smart”.

IoT enablers en nuestra vida cotidiana

Es muy posible que la llegada más significativa al usuario medio de este concepto haya sido con las televisiones inteligentes. Un aparato que hasta ahora únicamente ofrecía televisión, ya sea en canales abiertos o cerrados bajo demanda contratando algún servicio, de repente se les instaló Android y fueron capaces de conectarse a internet por Wifi, tener aplicaciones instaladas para el entretenimiento audiovisual y ofrecer servicios adicionales. Aquí fue cuando nos dimos cuenta que esto iba en serio, que ya no solo se reducía a nuestro teléfono inteligente. Internet había llegado a todos los rincones posibles. Si, es cierto que existían bombillas conectadas a la red y que el concepto de las casas inteligentes era conocido. Pero parecía todo algo de ciencia ficción y que aún nos quedaba tiempo para verlo. Pero de repente, otros electrodomésticos tenían firmware y recibían actualizaciones y complementos a través de la red. El internet de las cosas es algo que se perseguía durante mucho tiempo y, en campos más extendidos, va atado de los famosos “big data”. Estos sistemas son capaces de recopilar gran cantidad de datos para ser analizados y proveer de importantes conclusiones para el desarrollo y el campo de la tecnología. ¿Cómo se consigue todo esto? La parte más básica es simplemente instalar un chip en el producto y adelante. Pero hay maneras un poco más elaboradas para llegar al mismo sitio, y lo más importante, al alcance de todos.

Hay muchos más sistemas para poder lograrlo, pero uno de los más conocidos es, sin lugar a dudas, la Raspberry PI. Se trata de una pequeña placa, un microordenador, de hardware abierto, lo que significa que podemos modificarlo y añadirle lo que nosotros necesitemos para nuestro fin. No necesariamente debemos conectarlo a internet, pero es una de las vías con más éxito entre la comunidad. Al ser un microordenador dispone de un puerto de red, wifi, memoria y USB, aparte de pines adicionales para poder conectar otros componentes que no vienen de serie. No es especialmente cara y sin duda ha sido la elección de mucha gente para poder montar sistemas conectados a la red en aparatos muy curiosos. Por ejemplo, hay un proyecto público en su página web que se basa en realizar una señal con leds al más puro estilo “On Air” de las radios, la cual manda un mensaje a Twitter desde el usuario que se haya configurado previamente para anunciar que se está emitiendo en directo por, por ejemplo, Twitch. Parece una tontería, pero esta es la maravilla de poder usar estos productos para IoT: no es necesario que trabajemos en una gran compañía de tecnología para poder proveer de esta característica a lo que nosotros queramos. Estamos en un punto del avance tecnológico en el que cualquiera, con un poco de maña y buena documentación a su disposición, es capaz de dejar volar su creatividad y levantar proyectos simples de esta índole.

El IoT es un concepto que, como menciono, está presente en más sitios de los que nos imaginamos, pero a su vez, esto es su mayor debilidad. Erróneamente se ha decidido instalar pequeños chips que dan conectividad a cualquier cosa. Y si, cualquier cosa: hornos, interruptores, bombillas…incluso las lavadoras no se han salvado de ello. ¿Por qué es un problema? Porqué a día de hoy, pese a que los enablers son fáciles de implementar por las grandes compañías, por alguna razón que desconozco, deciden no tener un equipo que garantice la seguridad de estos sistemas. Estamos hablando que una gran multitud de dispositivos están conectados a internet y pueden darse situaciones como la que vivimos hace dos años en las que se creo una botnet de bombillas con IP. Esta botnet, o red de robots, provocó que Internet sufriera un gran ataque con una infección que se propagó a través de muchos dispositivos que pertenecen al IoT, infectándose en cadena y pudiendo robar datos.

Como veis, los enablers se pueden llegar a desarrollar en vuestra propia habitación con una placa como la Raspberry PI y un ordenador, aplicado a lo que más gracia os haga, pero nunca debemos olvidar las medidas de seguridad que protejan este smart device, ya que cualquier aparato conectado a Internet queda expuesto a los demás y corre el riesgo de ser atacado y usado incluso sin que seamos conscientes de ello. De modo que, no anuléis vuestra curiosidad con el IoT, pero id bien de la mano de los cortafuegos y las protecciones digitales.

Curso relacionado: Curso Superior de Programación con HTML5 y CSS