Estrategias para crear capital humano en una empresa
Puntos clave
- Para atraer talento, es esencial trabajar el employer branding, cuidando la comunicación interna y la experiencia de los candidatos.
- Reclutar eficazmente requiere planificar a corto, medio y largo plazo qué perfiles necesita la empresa.
- La conciliación, la evaluación del desempeño y una comunicación interna fluida son claves para mantener el compromiso de los empleados.
Tabla de contenidos
La importancia de captar y fidelizar el capital humano
La clave del éxito de cualquier organización está en captar y fidelizar el capital humano. Hoy en día ya no hablamos simplemente de trabajadores o colaboradores, sino de capital humano. Para construirlo en tu empresa, es fundamental centrarse en dos aspectos: reclutamiento y retención.
Para atraer talento de manera competitiva, la organización debe trabajar su marca corporativa o “employer branding”. Esto implica desarrollar estrategias que hagan de la empresa un lugar atractivo para trabajar, desde la comunicación interna y externa, la publicación de ofertas, la interacción con candidatos, hasta la valoración de la plantilla actual. Convertirse en una organización deseable es clave para captar talento y fomentar la fidelización a largo plazo.
Cómo reclutar y retener talento de manera efectiva
El reclutamiento eficiente requiere planificación y especialización:
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Tener claro el tipo de personal que se necesitará a corto, medio y largo plazo.
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Contar con especialistas en recursos humanos con formación, experiencia y habilidades analíticas y comunicativas.
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Utilizar redes sociales, especialmente LinkedIn, para atraer talento y fortalecer la marca profesional y empresarial.
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No olvidar el talento interno: aprovechar el potencial de los empleados actuales mediante promoción interna y desarrollo profesional.
Para retener talento y mejorar el rendimiento de los equipos, algunas estrategias clave incluyen:
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Fomentar el trabajo en equipo y la implicación de los empleados.
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Liderazgo consciente que impulse empoderamiento y autorresponsabilidad.
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Desarrollo profesional mediante formación, mentoring y planes de carrera claros.
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Evaluación continua del desempeño para estimular y corregir donde sea necesario.
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Políticas de conciliación entre vida laboral y personal.
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Comunicación interna fluida y bidireccional, con feedback constante.
Estas estrategias deben implementarse de manera continua y coordinada, formando parte de la cultura de la organización.
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