Tipos de apps que existen en el mercado

Hoy me gustaría hablaros de los tipos de aplicaciones que podemos encontrar en las stores de aplicaciones. Y no me refiero a nativas, web o híbridas, ya que eso no necesita el sistema de markets para descargarlas. Por ejemplo las apps web se ejecutan directamente en el navegador. No, no me refiero a esto, me refiero a los distintos tipos referente a los servicios que dan. Como bien sabéis una app tiene un propósito y gracias a eso las podemos englobar en un grupo. Uno de estos grupos son los videojuegos, que no son aplicaciones per se, pero comparten espacio con ellas. Vamos a hacer un repaso de mi visión personal de estos grupos, ya que esto es una percepción de usuario y desarrollador que tengo, no es nada oficial o establecido por convenio en el mundillo.

Apps distintas, mismo mercado

Aplicaciones sociales. Las más conocidas sin duda, todos las usamos, o al menos la gran mayoría de algún modo u otro. Estas apps son todas las que permiten compartir nuestra actividad de algún modo, es decir, nuestra posición, mensajes, fotos, etc, y que están pobladas por usuarios. Son aplicaciones que alimentan una red social y, como bien sabemos, hay redes sociales para prácticamente todo: opiniones en restaurantes, nuestra vida diaria, fotografía, vídeo, creación de contenido para el resto de usuarios…Las redes forman parte de nuestra existencia y fueron las que le dieron razón de existir a los smartphones. Sin ellas, estos aparatos sólo eran un objeto nuevo de la tecnología que podía complementarnos pero no tenía un propósito definido. Sin embargo, hoy en día, si no tienes Facebook, Twitter o WhatsApp, eres un rebelde y la gente se extraña. Yo mismo no estoy en la red del señor Zuckerberg y el resto de usuarios se extrañan o incluso tratan de venderme la red. Estas aplicaciones, por eso, suelen desear acceder a permisos un tanto privados del usuario por lo que debemos tener cuidado a cuales nos unimos.

Aplicaciones para servicios, es el otro grupo que se puede observar. Cosas como Just Eat para comida a domicilio, o Booking para encontrar hotel. Cierto es que estas dos empresas ya existían como página web, pero ahí está el asunto. Las aplicaciones servicio, como las nombro yo, son apps que han nacido por necesidad de mercado. Es mucho más sencillo tener una aplicación dedicada a nuestra página favorita a tener que entrar por el navegador, aparte de que las apps están, generalmente, optimizadas a ese funcionamiento. Una empresa que quiera ofrecer algún servicio a sus usuarios, ya sea para encontrar trabajo, hacer compras, comida a domicilio o organizar nuestras vacaciones, es obligatorio existir en el sistema móvil con un software dedicado a ello. Las aplicaciones web están muy bien, y gracias a los diseños responsive podemos empezar por ahí antes de invertir capital en desarrollo, pero sin duda una aplicación nativa va a favorecernos tanto a nosotros como a nuestros clientes.

Los videojuegos, otro pedazo de software que, a causa de su existencia en el market de aplicaciones, los usuarios han acabado por llamarlos de manera errónea, provocando que un alumno de programación de aplicaciones piense que está aprendiendo para hacer juegos, y no es así: los videojuegos siguen unas normas distintas. De todos modos la plataforma móvil ha acabado siendo uno de los objetivos de empresas de desarrollo, tanto grandes como independientes, como hemos podido observar en los últimos años: ya no son los indie que desean dar el salto a ellas, también corporaciones tan grandes como Electronic Arts (FIFA), King (Candy Crush), Gameloft (Asphalt), Square Enix (Final Fantasy) o la misma Nintendo (Super Mario Run). Y lo cierto es que algunas de ellas, si no hubiera sido por este mercado, no habrían construido su imperio económico, lo que demuestra la importancia de existir en el formato smartphone/tablet.

Aún así, debemos tener mucho cuidado de las aplicaciones fraude, tal y como hablé en mi último post. Estas apps también existen y tratan de imitar las originales, donde algunos cibercriminales han encontrado la manera de hacer negocio. Debemos tener cuidado qué tipo de aplicaciones descargamos, ya que la mejor protección ante el peligro no sólo nos la puede dar un antivirus, la última barrera somos nosotros: nosotros tenemos la última palabra a la hora de otorgar permisos al software, no sólo en el móvil, también en nuestros equipos de escritorio. Os sorprendería la cantidad de usuarios que desconocen esto y aceptan términos y condiciones a ciegas.

Resumiendo, considero que existen cuatro grupos de apps: servicios, sociales, videojuegos y fraude, y esto hace que actualmente nuestro teléfono sea la mejor herramienta para nuestro día a día si sabemos sacarle todo el jugo que puede dar.

¿Tenéis alguna app favorita, o set de aplicaciones, que os haya cambiado el modo de hacer las cosas?

Curso relacionado: Curso Superior de Desarrollo de Aplicaciones para Móviles