Rescisión del contrato laboral: todo lo que debes saber
La rescisión de un contrato es el punto y final a una relación laboral entre dos o más partes. En los siguientes apartados te acercamos al procedimiento que deben seguir tanto la empresa como la persona trabajadora a la hora de firmar este acuerdo.
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Tabla de contenidos
¿En qué consiste la recesión de un contrato? Causas
Antes de entrar en materia, es fundamental que tengas muy claro a qué nos referimos cuando hablamos de rescisión de un contrato laboral. Esta acción permite dejar por escrito que se finaliza la relación de trabajo entre las partes que con anterioridad habían firmado el acuerdo.
La anulación de este documento puede deberse a diversas causas, definidas todas ellas en el Artículo 49 del Estatuto de los Trabajadores. A continuación exponemos las más frecuentes para que puedas observar las diferencias y la relevancia de este procedimiento:
- Extinción durante el período de prueba: hoy en día la gran mayoría de los contratos, por no decir todos, tienen un período de prueba en el que se podrá rescindir o terminar la relación laboral sin ningún tipo de indemnización. Cuando vayas a acceder a un trabajo, es importante que te informes de cuánto tiempo durará esta fase. De este modo, tendrás pleno conocimiento de en qué momento lo has superado, por si la empresa quiere rescindir el contrato, pero se escaquea de pagarte la indemnización pertinente.
- Mutuo acuerdo: puede suceder que el trabajador decida cambiar de trabajo como consecuencia de una promoción dentro de otra empresa, es por eso que, si ambas partes lo pactan, se podrá rescindir el contrato con acuerdo entre el trabajador y la empresa. Esto implica que se acuerde el finiquito y se decida no pagar indemnización, cosa que puede llegar a favorecer a las dos partes por el hecho de no tener que litigar para extinguir la relación laboral.
- Contratos temporales o de obra y servicio: otro de los motivos por los que puede acabarse con un contrato es el hecho de que se hubiese pactado que tendría una duración determinada. En este tipo de convenios tampoco hay indemnización por finalización del mismo, y como mucho puede llegarse a una prórroga o pasarlo de temporal a indefinido.
- Dimisión del trabajador: en este punto hay que tener una idea clave en mente, dar el preaviso correspondiente. No olvidéis nunca que si el trabajador decide irse por su cuenta debe dar un preaviso que previamente habrá sido marcado en la firma del contrato. Si no lo hace, tampoco tendrá derecho a cobrar una indemnización por fin de la relación laboral.
- Modificaciones sustanciales de las condiciones de trabajo y extinción por movilidad geográfica: se trata de dos causas en las que el trabajador tiene derecho a rescindir el contrato con una indemnización, de manera que cuando las condiciones del trabajo cambian de manera radical o cuando la sede de la empresa se traslada a otro municipio, el trabajador tendrá derecho a rescindir. Eso sí, cobrando una indemnización.
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Una vez hemos hablado de las causas de rescisión de los contratos laborales, tenemos que hacer referencia a qué debemos hacer si nos encontramos ante esta situación. ¡Vamos allá!
Cómo debemos actuar ante una recesión de contrato: ¡encuentra el lado positivo!
Adaptarse o morir. Lo que a priori es una mala situación, puede ser el primer paso hacia la oportunidad de tu vida. Vamos a ver algunos de los pasos a dar a la hora de enfrentarse a este contexto. ¡Apunta!
Revisar el finiquito
Es muy importante que revises si están correctamente incluidas todas aquellas partidas que la empresa te debe en concepto de finalización del contrato de trabajo. Tómate tu tiempo y analiza la situación con calma.
Rescisión de un contrato laboral: conforme-no conforme
En la rescisión del contrato laboral, es relevante que firmes como no conforme cuando no estés de acuerdo con el importe que ha decidido abonarte la empresa o con las causas del despido. Es fundamental, que seas muy consciente de lo que estás rubricando.
Terminar de la manera más cordial posible
Sabemos que es un momento complicado, pero intenta acabar de la mejor forma con la empresa de la que te vayas, ya que no sabes si en un futuro volverás a trabajar en ella o a tener relaciones comerciales con la misma.
Oportunidad para cambiar tus metas
Una vez hemos hablado de las causas más objetivas y de los motivos que pueden llevar a la extinción del contrato, acabamos este blog haciendo referencia a algunas ideas que pueden poner en marcha las personas que se queden sin trabajo.
- Crear una ‘Start up’: hoy en día, con las nuevas tecnologías, se puede pensar en crear una empresa con base tecnológica con un fin concreto, para posteriormente hacerla crecer a través de inversores.
- E-comercio: basándonos en lo anterior, puedes explorar el mundo online mediante la venta de productos a través de Internet, pudiendo llegar a cualquier rincón del mundo. Además, te permite tener la ventaja de trabajar desde casa.
- Crowfunding: producir un nuevo proyecto mediante la financiación de pequeños inversores pidiendo el capital que necesitamos a través de Internet.
- Reinventarse: cuando se extingue la relación, es necesario buscar nuevas opciones como estudiar y no quedarse parado, además de intentar desmarcarse del resto de competidores en el mercado para poder volver a formar parte del mundo laboral.
Como ves, existen muchas causas de poner fin a una relación laboral, pero con el fin de la misma, también surgen muchas maneras de volver a estar en activo.
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